El 2017-06-16 fuimos a dar una vuelta para visitar la zona de Belate. Aunque la climatología no era especialmente apropiada para ver flores, la niebla las cierra en su mayor parte, fue una visita muy rica y provechosa en muchos aspectos. Ya de vuelta nos llamó la atención un castaño, Castanea sativa, cubierto de una gran cantidad de agallas, tantas que era difícil pasarlo por alto.
Agalla de Dryocosmus kuriphilus sobre yema de Castanea sativa.
Belate 2017-06-16
Después de unas consultas y algunas respuestas por parte de Carmen y Manuel nos dieron la pista definitiva: se trata de la avispilla asiática del castaño: Dryocosmus kuriphilus.
Esta pequeña avispa, miembro de la familia Cynipidae, es un diminuto insecto que apenas si llega a 3 mm de longitud. Originario de China un día “decidió” ir a recorrer el mundo. Para ello se basa en varias especies de castaños (Castanea), donde vive en su estado larvario, ya que como adulto apenas si vive 10 días.
Su ciclo vital dura un año, en el cual sólo es posible encontrar una generación de adultos; en contraposición a varios Cynipedae europeos, que afectan a los robles (Quercus), y que emergen repetidas veces.
Agalla de Dryocosmus kuriphilus sobre hojas, en su nervio central, de Castanea sativa.
Belate 2017-06-16
Durante los meses de junio a septiembre, las hembras depositan 3-5 huevos en las yemas de un total de hasta unos 100-200. Sin embargo, es posible que varias hembras hayan compartido la misma, pudiéndose encontrar hasta 20-30. Los huevos eclosionan en un mes o algo más y durante el otoño y el invierno, su crecimiento es tan lento, que las yemas no presentan indicios de estar infectadas.
Con la llegada de la primavera, el crecimiento larvario se acelera y es cuando en el árbol aparecen las agallas que la delatan. Las pupas, en función de las condiciones locales, se forman entre mayo y julio.
Agalla abierta de Dryocosmus kuriphilus sobre yema de Castanea sativa. Se ven varias larvas en su interior.
Belate 2017-06-16
Obviamente, un animalillo de estas características pasaría totalmente desapercibido, salvo por un pequeño detalle: genera un descenso importante en la producción tanto maderera como de castañas en los árboles a los que afecta, llegando en casos, a ocasionar la muerte del árbol, ya directamente o por afección de otros parásitos aprovechando el debilitamiento producido por las agallas. Estas se convierten en leñosas y perduran en el árbol ocasionando grandes daños en la cosecha de castañas. En condiciones severas se reduce su producción hasta un 70%. Pero no sólo eso, sino que las aberturas que producen los adultos a salir de ellas son vías de entrada para hongos como el chancro, Cryphonectria parasitiaca, que en el pasado ya puso en jaque a la población europea de esta especie.
Agalla de Dryocosmus kuriphilus sobre yemas y hoja de Castanea sativa.
Belate 2017-06-16
Como se ha dicho anteriormente, Castanea es género de alto valor comercial tanto en sus poblaciones silvestres como en sus plantaciones. Además, hay que contar que un gran número de especies de gran interés son afectadas por esta avispa fuera de su entorno natural: C. sativa, C. dentata, C. crenata, C. mollisima, C. segurini, C. henryi son algunas de estas víctimas principalmente alrededor del hemisferio norte.
La dispersión de Dryocosmus kuriphilus por el mundo se realiza principalmente por el transporte y comercio de madera y plantas infectadas. El que las agallas salgan después de la época de plantación de los árboles jóvenes es una gran baza para nuestra “traviesilla”; y sus andanzas son auténticas proezas. En 1941 se detecta en Japón, en 1963 en Korea; en 1974 en EEUU sobre C. dentata. En 2002 llega a Europa al norte de Italia sobre C. sativa. En el 2005 ya se ha difundido por una gran parte de Italia y se detecta en Francia y en Eslovenia. Otros países europeos afectados en diverso grado son: Austria, Bélgica, Croacia, Chequia, Alemania, Grecia, Hungría, Países Bajos, Portugal, Suiza, Turquía y Reino Unido.
Distribución europea de Castanea sativa. Las zonas verdes son donde se encuentran las poblaciones naturales, en ocre las ubicaciones de las plantaciones.
Las estrellas rojas, puestas al buen «tun-tún» (hay que ser optimistas), son los países en los que se ha encontrado Dryocosmus kuriphilus en distinto nivel de distribución. El mapa procede de wikipedia modificado para esta ocasión.
A nuestra península llega en 2012 cuando se localiza al oeste de Cataluña, en 2013 se detecta en Cantabria, en el 2014 en Galicia y Castilla y León, y con posterioridad en Andalucía y Extremadura. En Nafarroa-Navarra se tiene constancia de ello desde hace 3-4 años.
La lucha contra este insecto es complicada, ya que como casi todo su ciclo vital lo pasa dentro de la agalla, los insecticidas de contacto son poco efectivos. La lucha con feromonas no es posible en este caso, ya que la especie se reproduce por telitoquia, un tipo de partenogénesis en el cual las hembras producen huevos diploides sin fecundación, genéticamente similares a la madre. De hecho, nunca se han visto machos de esta especie. Por todo ello, la lucha se realiza mediante otras avispas parasitoides que la afectan. En Japón se ha tenido éxito con la introducción de Torymus sinensis, y aunque existen otros parasitoides potenciales, T. sinensis está siendo testeado por la Administración Central en áreas de Andalucía y Galicia antes de ser aprobada su distribución general.
Agalla de Dryocosmus kuriphilus nervio central de hoja de Castanea sativa, una distribución muy frecuente.
No podríamos asegurar que el punto corresponda a la salida de un adulto. Las agallas son tan fuertes, incluso para las avispas, que les cuesta varios días salir de ellas.
Belate 2017-06-16
En resumen, parece que tenemos otro riesgo para nuestras poblaciones de castaños, y que el bichito campeará a sus anchas por mucho tiempo. El éxito del control biológico de la plaga es algo que en el tiempo se descubrirá. Los parámetros y las variables lo convierten en un proceso azaroso, no exento de riesgos. Desconocemos si Torymus sinensis se acomodará en todas las regiones, y si lo hace optará por mantenerse fiel a su predisposición o decidirá cambiar de dieta. Nos gustaría pensar que ya que alguna de nuestros Torymidae, que también tenemos especies autóctonas en la familia, atacan al género Dryocosmus locales, alguno pudiera aficionarse a esta nueva aportación a la carta, pero la rápida expansión no da lugar, en principio, a que la jugada de tener controlada a esta indeseable sea sencilla.
Agallas de Dryocosmus kuriphilus sobre hoja de Castanea sativa. Parece indicar que una misma yema fue infectada por varias hembras.
Belate 2017-06-16
Por cierto; Dryocosmus kuriphilus está incluido en la lista de cuarentena de la EU. Por ello y algunas otras razones más puede ser interesante, si os las encontráis en el campo, avisar al departamento de medio ambiente, ayuntamiento, u otra institución competente con la localización del hallazgo.
Fichas técnicas:
El bueno:
Castanea sativa
Reino: Plantae
División: Magnoliophyta
Clase: Magnoliopsida
Orden: Fagales
Familia: Fagaceae
Subfamilia: Quercoideae
Género: Castanea
Especie: C. sativa Mill 1768
El feo (le ha tocado):
Torymus sinensis
Torymus nobilis, ilustración como ejemplo del género Torymus.
Fuente Wikipedia
Reino: Animalia
Filo: Arthropoda
Clase: Insecta
Orden: Hymenoptera
Suborden: Apocrita
Superfamilia: Chalcidoidea
Familia: Torymidae
Género: Torymus
Especie: T. sinensis Kamijo 1982
El malo (alguno tenía que ser, ¿no?):
Dryocosmus kuriphilus
Dryocosmus kuriphilus.
Fuente wikipedia
Fuente
Reino: Animalia
Filo: Arthropoda
Clase: Insecta
Orden: Hymenoptera
Suborden: Apocrita
Superfamilia: Cynipoidea
Familia: Cynipidae
Género: Dryoscomus
Especie: D. kuriphilus Yasumatsu 1951
Ornitología desde la ventana 
¡Qué estupendo y detallado estudio!
Joserra
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